Las Rutas del Viajero .com: DIA 14. FLORIDA. Islands of Adventure y preparativos ante Irma

8 de Septiembre de 2017.

Nada había cambiado de ayer a hoy, teníamos los deberes hechos y el día se presentaba con nubes y claros, por lo que no tenía sentido renunciar a seguir con los planes previstos, por lo que nos dirigimos a conocer el último parque que nos faltaba para acabar con éxito nuestra estancia en Orlando.

Islands of Adventure es un parque relativamente nuevo, pues abrió sus puertas en 1999 con el objetivo fundamental de hacer de complemento idóneo al ya clásico Universal Studios, ofertando nuevas y variadas atracciones, incluyendo la otra parte del mundo de Harry Potter, consiguiendo con ello ser competidor directo de Disney.

El proceso de llegada sería exactamente el mismo de ayer, salvo que esta vez torceríamos a la izquierda cuando llegamos al cruce de caminos, siendo todo lo demás idéntico hasta que has pasado el control de acceso.

Universal´s Islands of Adventure

Lo primero con los que nos encontraríamos, una vez dentro, sería con un área que hace las veces de recibidor y que está decorada de manera exótica, recordando los bazares del antiguo oriente o a los de países como Marruecos o Turquía. Esta zona está repleta de tiendas de souvenirs y recuerdos, así como de las que ofrecen servicios clásicos a los visitantes como taquillas o cajeros automáticos, entre otras cosas.

Port of Entry

Poco después llegaríamos a un amplio espacio, flanqueado en buena parte del mismo por una gran laguna que hace de nexo de unión entre las diferentes zonas que forman el parque temático. Después de estar un rato recreándonos con la imagen y hacernos unas fotos, comenzaríamos a rodear la misma, decidiendo hacerlo por la parte izquierda.

Laguna de Universal´s Islands of Adventure

De esta manera hallaríamos el área conocida como Marvel Super Hero, dedicada a los famosos superhéroes de los comics de los años sesenta tales como Spiderman, Lobezno, Capitán América, Hulk, los Cuatro Fantásticos, etc. La decoración de la zona está realizada como si fueran viñetas de tebeos, con colores llamativos e imágenes de muchos de los héroes recién mencionados.

Marvel Super Hero Island

Es aquí donde están localizadas algunas de las atracciones más fuertes del parque tales como la montaña rusa “Hulk Roller Coaster” o la caída libre de “Doctor Doom´s Fearfall”, donde decidiríamos no montar y es que ninguno teníamos hoy el cuerpo como para afrontar sensaciones excesivamente fuertes.

The Incredible Hulk Coaster

Doctor Doom´s Fearfall.Marvel Super Hero Island

Sí que nos animaríamos con una de las más exitosas y mucho más agradable que las anteriores. Me refiero a “The Amazing Adventures of Spider Man”, considerada como de las mejores de todo el parque gracias al increíble simulador en el que vives la aventura, contando además con gafas 3D. Sólo tendríamos que esperar quince minutos y es que hoy había todavía menos gente que ayer, notándose que Irma estaba de camino.

The Amazing Adventures of Spiderman

El viaje supone una lucha de Spider Man contra los Supervillanos, estando entre ellos el Doctor Octupus, entre otros, siendo una emocionante aventura que te hace meterte de lleno en la historia y en el enfrentamiento entre unos y otros, teniendo que lidiar contra bolas de fuego y tormenta eléctricas generadas por los perversos enemigos.

Tienda de The Amazing Adventures of Spiderman

Nos lo pasaríamos en grande, saliendo de ella con muy buen sabor de boca, cambiando acto seguido a una nueva región llamada Toon Lagoon en la que sus calles están repletas de personajes de historietas de hace medio siglo con un buen número de globos en los que se pueden leer chistes graciosos y divertidos, siempre que sepas inglés o te los puedan traducir. De todas maneras y para ser totalmente sincero, tengo que reconocer que no tenía la menor idea de quienes eran muchos de los protagonistas a excepción, claro está, de Popeye, Olivia o Beety Boop.

Toon Lagoon

Creo que también es importante comentar que el principal problema de esta área es que se basa casi en su totalidad en atracciones acuáticas, por lo que si no te apetece mojarte es probable que pases de largo y no te detengas demasiado aquí. No era ese nuestro caso, pues con el bochorno que hacía nos apetecía bastante refrescarnos así que nos dirigimos a montar en sus dos atracciones estrella. Comenzaríamos con “Popeye & Bluto´s Bridge” donde en un gran bote circular afrontas un viaje a lo largo de unos rápidos donde hallarás cascadas, chorros de agua y una gran caída que te harán salir totalmente calado de la misma. Dependiendo de la suerte podrás salir más o menos mojado ya que al ir girando no se sabe a quién le tocarán las diferentes sorpresas del recorrido, pero aún así no serán simples salpicaduras.

Popeye & Bluto´s Bilge Rat Barges.Toon Lagoon

Justo en frente de la anterior estaba “Doodley Do Right Ripsaw Falls” donde cambiaríamos los neumáticos circulares por un vehículo con forma de tronco. La mayor parte del viaje es bastante tranquilo mientras flotas a lo largo del río y te ríes de las tonterías que hacen los personajes que vas encontrando en el camino. La parte más intensa no te pilla de sorpresa, ya que ves venir el precipicio de veinte metros que es el momento estrella de la atracción. Aún así, la caída, bastante pronunciada y en picado, hace que cuando chocas contra el agua, la ola que se levanta te cale bastante y sea imposible no mojarse.

Dudley Do Right´s Ripsaw Falls.Toon Lagoon

Dicen que la atracción se parece bastante a Splash Mountain de Disney que no tuvimos oportunidad de disfrutar al estar cerrada, así por lo menos nos llevábamos una similar a aquella.

Estábamos totalmente calados, sin una parte de nuestro cuerpo seca, por lo que decidimos probar las máquinas secadoras que estaban cerca por cinco dólares. Hay que decir que no son demasiado eficientes pues aunque sirven para dejar que chorrees agua, la ropa sigue quedando bastante húmeda, así que si es un día donde no haga mucho calor cuidado con los constipados.

En los casos anteriores en la primera atracción no tendríamos que esperar y en la segunda sólo quince minutos, por lo que íbamos bastante bien de tiempo.

En contraposición al párrafo anterior no nos ocurriría lo mismo con nuestro siguiente destino, donde tendríamos que afrontar la espera más larga de los dos parques Universal, vamos que yo creo que estaba allí todo el mundo que había pagado la entrada ese día, tirándonos cincuenta minutos en la fila para conseguir montar en “Skull Island: Reign of Kong”, la zona más nueva del parque, inaugurada el año pasado.

Skull Island - Reign of Kong

Eso sí, la espera se haría realmente amena pues es una hazaña en sí misma, al caminar por las cavernas y catacumbas oscuras de la misteriosa isla, encontrándote con alguna que otra sorpresa que te puede dejar blanco.

Así irían pasando los minutos hasta, que por fin, conseguiríamos que llegase nuestro turno y pudimos montar en el vehículo en el que íbamos a realizar la expedición, retrocediendo en el tiempo hasta el año 1930.

El viaje, en el que se utilizan gafas 3D, es fascinante, explorando lentamente los confines de Skull Island, encontrándonos con bichos gigantes, criaturas colosales, dinosaurios y, como no podía de ser de otro modo, con el gran rey Kong el cual se convertirá en nuestro aliado ante una peligrosa amenaza, la cual no desvelaré.

Skull Island - Reign of Kong

Merece muchísimo la pena y creo que debe ser una de esas experiencias que no se debe dejar de vivir.

En sólo unos pasos entraríamos en un nuevo mundo, aunque muy relacionado con la temática del anterior. Me refiero a Jurasicc Park, una excelente recreación del famoso mundo de Spielberg. En el podríamos interactuar con los inmensos dinosaurios en más de una ocasión, comenzado con los de su atracción estrella conocida como “Jurassic Park River Adventure”, donde, montados en un barco, haríamos un recorrido por un río que se interna en medio de la selva, encontrándonos con los fabulosos animales prehistóricos, pudiendo ver a los tranquilos triceratops y diplodocus, entre otros, respecto a los más pacíficos, y a los velociraptores y tiranosaurios entre los más agresivos, teniendo que escapar de estos últimos para evitar ser devorados, haciéndolo a través de una gran caída que nos estrellaría directamente contra el agua consiguiendo que, nuevamente, termináramos empapados.

Jurassic Park River Adventure

La siguiente parada sería para encontrarnos frente a frente con un velocirráptor, que nos serviría para comprobar las dimensiones y envergadura del mismo y hacernos una idea de lo que duraríamos si nos cruzáramos con uno.

Ya había hambre en el grupo así que aprovecharíamos una pizzería que estaba en esta zona llamada Predattoria para saciar nuestro apetito con unas pizzas de pepperoni y jamón y queso, lo que nos vendría también muy bien para reponer fuerzas.

Con la tripa llena sólo tendríamos que cruzar en frente de donde estábamos para llegar hasta Pteranodon Flyers, una atracción pensada sólo para niños, aunque se permite un acompañante adulto con cada uno de ellos. Como tanto Guille como Javi querían montar, pues les acompañaríamos Cristina y yo, disfrutando de un breve paseo sentados en unos asientos que van colgados de un raíl y que hacen las veces de estos pájaros voladores de pico y alas puntiagudas. Aquí estaríamos media hora hasta que llegó nuestro turno, para luego sólo disfrutar de la atracción menos de dos minutos, por lo que creo que no merece la pena esperar tanto para lo que ofrece.

Pteranodon Flyers

Por cierto que en la mitad del paseo anterior, las amenazantes nubes que llevaban acompañándonos desde hacía una hora, se tornarían más negras y comenzarían a descargar con fuerza toda el agua que llevaban dentro y os puedo asegurar que era mucha, pues nos dejarían casi como si hubiéramos montado en una atracción de agua.

Ante tal panorama, no dudaríamos en resguardarnos debajo del techo de uno de los restaurantes cercanos hasta ver si remitía el temporal, pero parece que había llegado para quedarse y que ya no pararía en toda la tarde, así que nos pusimos los chubasqueros y nos pegamos una carrera hasta el cercano mundo de Harry Potter. Si ayer ya nos quedamos sorprendidos con Diagon Alley, esta zona conocida como Hogsmeade, tampoco te deja indiferente y te impresiona del mismo modo que aquella.

Al venir de la zona de Jurasicc Park lo primero con lo que nos encontraríamos sería con el enorme castillo de Hogwarts situado en lo alto de una roca, elevándose así sobre el pequeño pueblo de Hogsmeade y todo el mundo mágico.

The Wizarding World of Harry Potter - Hogsmeade

Accediendo a través de sus enormes puertas llegaríamos hasta la atracción estrella tanto de esta área como de todo el parque conocida como “Harry Potter and the Forbidden Journey”, en el que ya en la zona de espera quedas sorprendido por la recreación perfecta de los escenarios de la saga como las mazmorras y la famosa galería de retratos de varios pisos en que muchos de los mismos cobran vida cuando sienten que les estás observando.

Harry Potter and the Forbidden Journey

Tras varias sorpresas más llegaría el momento de embarcar, con las correspondientes gafas 3D, en unos bancos, sujetados por unos inmensos brazos mecánicos, que nos llevarían a un viaje inolvidable en el que sobrevolaríamos el castillo de Hogwarts, evadiríamos el ataque de un dragón, viviríamos un combate de Quidditch sobre escobas mágicas y lucharíamos contra dementores dentro de la Cámara Secreta entre otras muchas aventuras.

La trama es tan real que nos sentiríamos dentro de la misma película y saldríamos entusiasmados de allí. Aunque sin llegar a la atracción de Flight of Passage del mundo de Pandora de Animal Kingdom, creo que casi la iguala y, sin duda, es la segunda mejor atracción de todos los parques de Orlando que pudimos probar, para nuestro gusto. Además sólo tuvimos que espera veinte minutos, por lo que fuimos auténticos privilegiados ya que la espera suele estar en dos horas o más en días de mucha afluencia.

Por cierto, que es obligatorio dejar las mochilas y los bolsos, así como objetos que puedan sufrir daños, en las taquillas que se encuentran en la entrada, que son gratuitas mientras dure la atracción, cobrándote si las utilizas durante más tiempo.

Al salir seguía diluviando por lo que las dos montañas rusas de Harry Potter (Dragon Challenge y Flight of the Hipogriff) estaban clausuradas, aunque tampoco nos importaría demasiado pues al final no suponían nada nuevo en lo que a atracciones se refiere.

Pasaríamos entonces a pasear, dentro de lo que cabe, pues estábamos empezando a calarnos, por la bonita aldea de Hogsmeade repleta de detalles: casas de piedra y tiendas con techos de pizarra inclinados, ventanas con múltiples marcos arqueados, frontones y chimeneas altas y retorcidas, calles adoquinadas, farolas de gas… Es increíble lo logrado que lo tienen todo.

The Wizarding World of Harry Potter - Hogsmeade

Qué pena que el tiempo se nos hubiera estropeado en el último momento, pues no podríamos disfrutar como quisimos de los exteriores. A cambio nos entretuvimos más en las tiendas que se distribuyen por todo el área y que son idénticas a las de la película, al igual que sucedía en Diagon Alley. No faltaba ninguna, las especializadas en dulces, en vestuario, en juguetes y, por supuesto, en varitas mágicas.

Tampoco faltan restaurantes donde comer, como una taberna rústica que sirve platos típicos ingleses, que tenía buena pinta, aunque no la probamos, o una oficina de correos, donde se puede enviar una postal con un matasellos de Hogsmeade y comprar artículos de papelería y búhos de juguete.

Casi al terminar el recorrido de esta área de Harry Potter, nos encontraríamos con algo que habíamos echado en falta al no haber comprado la entrada combinada de los dos parques de Universal: la locomotora Hogwarts Express. Sí, más pequeña y sin que pudiera moverse, pero algo es algo, además para que fuese más realista, allí estaba el maquinista que se prestaba a hacerse fotos con todos aquellos que queríamos llevarnos un nuevo recuerdo de nuestro paso por la tierra de los magos.

Hogwarts Express.The Wizarding World of Harry Potter

Seguía lloviendo con fuerza y ya eran las 18:00 por lo que pasaríamos con más pena que con gloria por los mundos de The Lost Continent y Seuss Landing, de los que también hay que decir que no poseen atracciones realmente destacables. A lo mejor cabría mencionar en el primero de ellos los shows de “Simbad” y “La furia de Poseidón”, pero decidimos renunciar a ellos pues es cierto que estábamos bastante cansados y algo nerviosos por todo lo que venía en los días posteriores.

Poseidon´s Fury. The Lost Continent

Aun así y todo y cuando pasábamos por el gracioso mundo de Seuss Landing, inspirado en un autor de cuentos infantiles americanos y que no conocíamos, varios de mis amigos y los más pequeños se animarían a montar en “The Cat in the Hat”, en el que se hace un recorrido a bordo de un vehículo algo inquieto, que va pasando por escenas del cuento con el mismo nombre que la atracción. Yo no montaría pensando que daba muchas vueltas, pero todos coincidieron que era bastante divertido y recomendable.

Seuss Landing

Ahora sí que había llegado el final, este era el momento en el que decíamos adiós a los parques temáticos de Orlando, a siete días donde nos volvimos a sentir niños otra vez, donde pudimos emocionarnos, vibrar, gritar, cantar, bailar, sin temor a que nadie nos juzgase por ello, porque dentro de estos mundos fantásticos que son Disney y Universal, casi todos conseguimos olvidarnos de esa vida de adultos y dejamos volar nuestra imaginación hasta sentirnos parte de esos sueños que pensábamos que no se cumplirían y que, sin embargo, aquí sí se hacen realidad.

Pero también es cierto que puede llegar a ser peligroso permanecer demasiado tiempo aquí, porque corres el peligro de querer quedarte para siempre, ¿Por qué acaso no es tentador levantarte cada mañana en un mundo mágico diferente, donde el bien siempre prevalece sobre el mal, la tristeza es desterrada y al final siempre acabas comiendo perdices?

Desgraciadamente, pronto tendríamos que volver a la realidad, empezando por rellenar el depósito del coche hasta arriba. La gasolinera en la que siempre parábamos estaba desbordada y tendríamos que esperar casi media hora para que llegara nuestro turno.

Gasolinera llena ante la llegada del Huracán Irma

Poco después pasaríamos por el Walmart, donde siempre habíamos hecho la compra, encontrándonos una imagen desoladora, pues un número enorme de estantes estaban vacíos, no teniendo muchos productos básicos y de primera necesidad como agua, pan, diferentes tipos de leche.

Estantes vacíos ante la llegada del Huracán Irma

Era evidente que la cuenta atrás había comenzado y todo el mundo estaba haciéndose con provisiones para afrontar lo mejor posible la llegada de Irma. No quedaba casi de nada, por lo que tuvimos que conformarnos con garrafas de zumo de manzana, algo de leche desnatada y los bollos y bolsas de picoteo que quedaban por descarte.

Estantes vacíos ante la llegada del Huracán Irma

Según llegamos, no perderíamos un minuto, haríamos las maletas lo más rápido posible y conseguíamos estar en la cama sobre las 22:00, pues mañana teníamos por delante un buen madrugón y muchas horas de carretera, con el único objetivo de dejar lo más atrás posible al temible huracán de fuerza cinco.

DIA 14. FLORIDA. Islands of Adventure y preparativos ante Irma

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