FIORDOS - DIA 10. De Gudvangen a Myrdal. Ruta épica entre fiordos y el tren de Flam

27 de Agosto de 2023.

Puede que no suene muy creíble decir que la jornada de hoy se presentaba como una de las más increíbles que íbamos a vivir en nuestra ruta por Noruega. Algo normal si se tiene en cuenta que todos los días que habían transcurrido hasta aquí se habían caracterizado por lugares objeto de constantes calificativos superlativos, pero es que este país es así, una caja inacabable de parajes y maravillas naturales que hacen que no se agoten nunca las sorpresas y que las emociones a flor de piel estén siempre presentes.

GUDVANGEN

En el corazón del paisaje de los fiordos noruegos, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, en medio de la hermosa región de Sogneford, se encuentra la ciudad de Gudvangen, con una población de 150 habitantes. Aunque la localidad es pequeña, esta es muy popular por el tránsito constante de viajeros, dado que en sus inmediaciones están algunos de los lugares más famosos, turísticamente hablando, del país.

Gudvangen significa “Valle de los Dioses”. Y cuando miras a tu alrededor, a esa poderosa naturaleza, rodeada de altas montañas, con una atmósfera mística, uno puede imaginar lo cerca que los antiguos habitantes del lugar debieron haberse sentido de sus dioses en aquel entonces. Después de pocos minutos en un entorno así, no me habría sorprendido si el mismo Odín se hubiera aparecido repentinamente ante mí. De hecho, el nombre de Naeroyfjord, el fiordo que baña las aguas de la población, deriva del antiguo dios nórdico Njörd.

El dios de la gente de mar también presta su nombre al pueblo vikingo de Njardarheimr, la principal atracción turística de Gudvangen, por la que, en principio, íbamos a empezar nuestras visitas de la mañana.

Poblado Vikingo de Gudvangen

Sobre todo, el valle vikingo Gudvangen con el pueblo vikingo, valga la redundancia, quiere ser un patrimonio cultural vivo. El valle también estuvo habitado durante la era vikinga, encontrándose varias tumbas de ese periodo. Sería en 2017 cuando se abrió al público como un lugar de visita permanente.

Actualmente, el pueblo consta de unos veinte edificios completamente acabados, construidos con el estilo y los métodos de la era vikinga. Los constructores dieron gran importancia a la autenticidad histórica, por ejemplo, en los materiales utilizados, como sangre de buey u óxido de cobre en los colores.

Se pueden encontrar una herrería, un taller textil, un gran salón de jefes y un fabricante de joyas. Además como no es un museo con objetos históricos sensibles, se puede tocar todo y participar en actividades como el lanzamiento de hachas, tiro con arco, tocar el tambor o jugar a un juego similar al ajedrez de la época.

Es importante ir con la idea de que es una recreación y no un museo. En cualquier caso, cuando una vez allí vimos el precio de la entrada y teniendo en cuenta tanto lo que ofrece como el tiempo limitado del que disponíamos decidiríamos descartarlo.

Su horario es de 10:00 a 18:00 de abril a septiembre y de 10:30 a 14:00 de octubre a marzo. El precio de la entrada es de 205 NOK.

Tras la renuncia anterior, decidiríamos pasear un rato por la ribera del fiordo de Naeroy, cuyas aguas bañan la propia población de Gudvangen. Caminar por aquí es una auténtica delicia para los sentidos, pues a las colosales montañas que te rodean hay que sumarle las cascadas que caen a plomo desde las mismas, las aguas limpias y transparentes y el río que desemboca en las inmediaciones. Un auténtico paraíso en la tierra.

Fiordo de Naeroy desde Gudvangen

De casualidad también encontraríamos dos bonitas esculturas de madera representando un vikingo y un drakar (barco vikingo), donde no podríamos evitar sacarnos las respectivas fotografías. Se encuentran al aire libre en la terraza de una cafetería llamada Gudvangen Fjordtell y no es necesario consumir nada para ello. Aunque la pregunta es si podrás evitar la tentación de probar uno de los deliciosos gofres con chocolate, crema o mermelada que venden aquí.

Escultura de Vikingo y Drakar. Gudvangen

BAKKA

Bakka es otra preciosa y diminuta población situada a las orillas del fiordo de Naeroy a sólo cinco kilómetros de Gudvangen, por lo que se puede llegar hasta ella a través de un bonito sendero al lado del agua. Esta vez no podríamos llegar de esta idílica manera hasta ella por falta de tiempo, pero sí que lo haríamos con el coche.

Bakka

Bakka y su iglesia

Aunque es cierto que su mayor atractivo es su propio entorno también habría que hacer mención de su bonita iglesia construida en madera, sus casitas al lado del fiordo, una pequeña playita para los más atrevidos e incluso una mesa en la parte alta donde poder hacer un picnic con unas vistas que no olvidarás nunca. Vamos, para quedarse todo el día sólo en este lugar.

CRUCERO GUDVANGEN - FLÅM

Después de haber abierto boca con los planes anteriores, comenzaban los platos fuertes del día, así como leéis, y es que lo que llevábamos hecho se iba a quedar pequeño en comparación con lo que estaba por venir.

Un cuarto de hora antes de las 12:00 estábamos en el puerto de Gudvangen listos para embarcar en el crucero que nos iba a  llevar hasta Flam recorriendo dos de los fiordos más impresionantes del mundo: Aurlandsfjord y Naeroyfjord. Ambos pertenecientes al descomunal Sognefjord, el más grande de Noruega y segundo del mundo. Era un ferry moderno, amplio y totalmente eléctrico con amplias zonas en las cubiertas para no sentirte agobiado y con sitio para todos.

Nada más marcar las doce, empezamos a notar que el barco comenzaba a moverse y a separarse del puerto. El agua clara y tranquila, rodeada de acantilados escarpados, nos permitiría navegar en primer lugar por el estrecho fiordo de Naeroy, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. No es para menos, gracias a su extraordinaria belleza natural que deriva de sus paredes de roca cristalina estrechas y empinadas que se elevan hasta 1400 metros directamente desde el fiordo.

Bakka desde Navegación por el Fiordo de Naeroy

Navegando por el Fiordo de Naeroy

Navegando por el Fiordo de Naeroy

La estrechez en algunos puntos era de menos de 300 metros pareciendo que en algunos momentos las paredes se juntarían y acabaríamos aplastados por capricho de los dioses nórdicos.

Navegando por el Fiordo de Naeroy

Navegando por el Fiordo de Naeroy

Laegdafossen desde Navegación por el Fiordo de Naeroy

Lástima que hoy nos había tocado el peor día en cuanto a meteorología se refiere y una fuerte lluvia no dejaría de acompañarnos en todo el recorrido, unido a tramos con densas nubes que hacían que no pudiéramos disfrutar de las mejores perspectivas de la zona. Sin embargo, el halo de misterio que envolvía el ambiente sí que era digno de reseñar.

Poco a poco dejaríamos atrás Naeroyfjord, pasando a navegar por el más ancho, pero no menos bello, Aurlandsfjord, donde nos recibirían varias cascadas que acrecentaban aún más la sensación de hallarnos en un cuento de hadas. Todo era apoteósico y la navegación y todo lo que estábamos presenciando resultaba abrumador.

Navegando por el Fiordo de Aurland

Navegando por el Fiordo de Aurland

Sólo dos horas después de nuestra partida llegábamos hasta la localidad de Flam, lo que nos pareció tiempo más que insuficiente para absorber el esplendor natural y la belleza de esta área de los fiordos, quedándonos con ganas de mucho más.

FLÅM

A las 14:00 desembarcábamos en este hermoso pueblo que se encuentra justo en el extremo interior del Aurlandsfjord. Se encuentra rodeado de escarpadas montañas, rugientes cataratas y estrechos valles.

Tiene una población de unos 400 habitantes por lo que depende prácticamente en su totalidad del turismo, algo que no es un problema al ser uno de los destinos más solicitados de Noruega, atrayendo a medio millón de personas al año.

Flam desde Navegación por el Fiordo de Aurland

Su entorno invita a pasear y a visitar su pequeña iglesia, así como contemplar sus casitas de madera, pero no nos engañemos, la mayoría de los que llegamos hasta aquí es por un motivo y es tomar el mítico e icónico tren de Flam, algo para lo que tampoco nos sobraría mucho tiempo, por lo que dejaríamos los paseos por el pueblo para mejor ocasión.

TREN FLÅM - MYRDAL

Las 14:35 era la hora que habíamos elegido para realizar el famoso trayecto en tren, por lo que tras desembarcar del barco y recrearnos lo justo con la pequeña localidad, nos dirigimos a la estación, que se encuentra a pocos pasos del puerto, por lo que se puede ir con toda tranquilidad y sin prisas de un lado a otro.

La línea entre Flam y Myrdal está considerada como una obra maestra de ingeniería ferroviaria sin parangón en toda Europa. Son 20 km de vías con un desnivel de 865 metros y 20 túneles que suman un total de seis kilómetros. Para salvar semejante desnivel, en un trazado tan corto hubo de concebirse un trazado en espiral a través de túneles en curva excavados en la montaña. La envergadura del proyecto fue tal que se tardó once años en construirse.

Tren Flam - Myrdal

Entorno en el trayecto del Tren Flam - Myrdal

Entorno en el trayecto del Tren Flam - Myrdal

La pendiente, absolutamente inusual, ha obligado a dotar a los vagones de cinco frenos diferentes, cada uno de los cuales tiene capacidad para frenar todo el convoy. El trayecto es una experiencia única, ya que a los abruptos precipicios encajonados entre montañas cubiertas de glaciares y nieves eternas les sucede la cascada de Kjosfossen.

Entorno en el trayecto del Tren Flam - Myrdal

Entorno en el trayecto del Tren Flam - Myrdal

Entorno en el trayecto del Tren Flam - Myrdal

Es aquí donde tiene lugar otra curiosa experiencia y es que en este entorno único hace su aparición una huldra de cabello rubio e intenso vestido rojo que intentaría seducirnos e hipnotizarnos a los allí presentes con una danza en honor a la naturaleza. Las huldras son criaturas mitológicas escandinavas con cola de zorro o vaca que se aparecían a los hombres entre la niebla y la lluvia, seduciéndolos y haciéndolos desaparecer.

Kjosfossen en el trayecto del Tren Flam - Myrdal

Kjosfossen en el trayecto del Tren Flam - Myrdal

La vista más espectacular es la que se ofrece poco antes de entrar al túnel de Nali: el tren avanza a lo largo de tres marcadas pendientes en paralelo al zigzag de la antigua calzada (21 curvas cerradas).

El viaje dura escasamente cincuenta minutos; en los puntos más llamativos del recorrido el tren disminuye la velocidad y en ocasiones llega a pararse. En cualquier caso es un viaje único pues constantemente el tren pasa junto a ríos, cascadas, gargantas profundas, picos nevados que de repente se convierten en granjas de montaña, o el pintoresco valle de Flam, que se encuentra al borde del Aurlandsfjord.

Entorno en el trayecto del Tren Myrdal - Flam

Para los amantes de la fotografía, como es mi caso, es importante hacerse con un asiento al final o al comienzo de cualquier vagón, ya que las ventanas se pueden abrir, y si se puede el lado derecho mejor que el izquierdo, pues ofrece mejores perspectivas, aunque al principio del trayecto parezca que sea mejor el lado contrario.

Cuando se llega a Myrdal, te permiten estar allí veinte minutos que se pueden aprovechar para seguir haciendo fotos y relajarte en un entorno maravilloso, antes de volver a tomar el tren para regresar a Flam.

Estación de Myrdal

Estación de Myrdal

Flamsbana en la Estación de Myrdal

Tras la increíble experiencia no puede estar más de acuerdo con varias revistas que lo consideran el mejor tren del mundo.

AUTOBÚS FLÅM - GUDVANGEN

Tras volver a Flam, optaríamos por tomar un chocolate caliente y  dar un pequeño paseo entres sus casitas de madera, las praderas de verde intenso y las orillas del fiordo, disfrutando de su increíble entorno y relajándonos en la naturaleza.

A las 18:15 partía el autobús que enlaza las localidades de Flam y Gudvangen, estando en la estación diez minutos antes. Con este trayecto de veinte minutos completábamos una ruta circular única, sin necesidad de tener que coger el coche para nada.

Las reservas de todos los billetes durante el día de hoy, así como el pago respectivo lo haríamos a través de la página https://www.norwaysbest.com/es, donde vienen todas estas opciones y otras muchas así como los precios y toda la información necesaria.

Cuando llegamos a Gudvangen continuaba lloviendo por lo que la mejor opción, no cabía duda, que era marcharnos a nuestra cabaña de madera y pasar el resto de la tarde relajados y calentitos, para sobre las 20:30 cenar unas hamburguesas y acostarnos pronto que mañana teníamos otra larga e intensa ruta en coche, más las correspondientes actividades y había que estar descansado para ello.


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